¿Qué es y cómo realizar un análisis de riesgos?

análisis de riesgos

En el ámbito de la gestión empresarial, una planificación estratégica eficaz es esencial para asegurar la sostenibilidad y el crecimiento a largo plazo. Dentro de este contexto, el análisis de riesgos se establece como un pilar fundamental, proporcionando a los líderes una herramienta para anticipar, evaluar y mitigar los riesgos antes de que puedan comprometer la integridad y éxito de la organización. 

Este proceso no solo es indispensable para hacer frente a posibles desafíos, sino que también es útil para reforzar a la organización ante la actual incertidumbre del mercado.

A continuación, explicaré en profundidad qué es un análisis de riesgos, qué diferencias presenta respecto a la evaluación de riesgos y compartiré una breve guía sobre cómo implementar esta práctica.

¿Qué es un análisis de riesgos?

Para comenzar, veamos qué es un análisis de riesgos. Tener claro este concepto, nos ayudará a comprender mejor conceptos más complejos. En este sentido, el análisis de riesgos es un proceso estratégico clave que permite identificar, examinar y abordar los riesgos de una empresa antes de que se materialicen. 

En la práctica hablamos de llevar a cabo un proceso que nos permita prever tanto desafíos como amenazas que podrían afectar al curso normal de la organización, con el fin de mitigarlos.

Por otro lado, es preciso aclarar que este proceso se enfoca en proteger la integridad de la empresa frente a cualquier eventualidad. No se trata sólo de análisis de riesgo financiero, va mucho más allá.

Diferencia entre análisis y evaluación de riesgos

Otro de los conceptos que resuenan al hablar de riesgos es la evaluación de los mismos. Es más, a menudo, se confunden los términos análisis de una empresa o negocio y evaluación de riesgos. Y es que aunque el análisis de riesgos y la evaluación de riesgos son complementarios, pero no sinónimos. 

Por un lado, el análisis de riesgos se refiere al proceso de identificar los riesgos específicos y determinar su naturaleza, incluyendo la probabilidad de ocurrencia y el impacto potencial. 

Y, por otro, la evaluación de riesgos utiliza esta información para clasificar y priorizar los riesgos, enfocándose en aquellos que requieren atención inmediata o estrategias de mitigación. 

Así, mientras el análisis desglosa y examina los riesgos, la evaluación decide cuáles merecen recursos y planes de acción prioritarios. Esta es la diferencia entre análisis y evaluación de riesgos más evidente.

Otros puntos a resaltar son:

  • Enfoque. El análisis de riesgos se centra en la descomposición y comprensión detallada de cada riesgo. La  evaluación de riesgos lo hace en la decisión de qué riesgos necesitan ser abordados de manera prioritaria.
  • Metodología. Mientras que el análisis de riesgos utiliza métodos cuantitativos y cualitativos para determinar la magnitud y la probabilidad de los riesgos, la evaluación de riesgos emplea criterios de priorización para ordenarlos según su importancia y urgencia de tratamiento.
  • Resultados. El análisis de riesgos produce una comprensión detallada de cada riesgo individual, incluyendo sus causas y posibles efectos. La evaluación de riesgos resulta en una lista priorizada de riesgos, destacando aquellos que requieren atención inmediata.
  • Proceso. El análisis de riesgos es un proceso más detallado y técnico que busca cuantificar o cualificar los riesgos. La evaluación de riesgos presenta un carácter más estratégico que decide cómo se gestionarán los riesgos basándose en el análisis previo.

¿Cómo hacer un análisis de riesgos?

Veamos ahora de forma práctica cómo hacer un análisis de riesgos. Para ello, es necesario destacar los siguientes pasos:

1) Identificación de riesgos. Antes de nada, lo más importante es enumerar todos los riesgos potenciales, tanto internos como externos, que podrían impactar negativamente en la empresa.

2) Análisis de riesgo. A continuación, es importante evaluar la probabilidad de cada riesgo identificado así como su impacto potencial, para comprender la magnitud de cada uno.

3) Evaluación y priorización de riesgos. Basándonos en el análisis, en este tercer paso se debe evaluar qué riesgos son más críticos y requieren atención prioritaria. Como decía, es crucial basarse en el impacto y probabilidad de cada uno.

4) Desarrollo de un plan de gestión de riesgos. Seguidamente y con la información anterior, es momento de diseñar estrategias específicas para abordar, mitigar o eliminar los riesgos prioritarios, desarrollando un plan de acción detallado.

5) Implementación y monitoreo. Por último, lo ideal es aplicar estrategias de gestión de riesgos y establecer un sistema de monitoreo continuo para detectar nuevos riesgos y ajustar el enfoque según sea necesario.

A todo esto cabe añadir que existen distintos tipos de análisis de riesgos, donde se llevarán a cabo las fases anteriores. Algunos son:

  • Análisis riesgo-beneficio y coste-beneficio
  • AMFE o Análisis Modal de Fallos y Efectos
  • Análisis de causa raíz
  • Técnica Delphi
  • Análisis del árbol de decisiones
  • Matriz de probabilidad y consecuencia
  • What if

Análisis de riesgos: Ejemplos

Después de ver cómo hacer análisis de riesgos, pasemos a describir un ejemplo práctico. En este contexto, imaginemos una empresa de tecnología que va a lanzar un nuevo software de gestión empresarial. 

Veamos a continuación un ejemplo de cómo sería un análisis de riesgos y evaluación.

1) Identificación de riesgos

Los riesgos a los que se expone el proyecto son:

  • Riesgos técnicos. Hablamos de fallas en el software, incompatibilidades con otros sistemas o vulnerabilidades de seguridad.
  • Riesgos de mercado. Nos referimos a competencia intensa, cambios en las demandas del mercado o problemas con la reputación de la marca.
  • Riesgos operativos. Se basan en interrupciones en el desarrollo por falta de personal o retrasos en la cadena de suministro de hardware necesario para pruebas.
  • Riesgos legales y regulatorios. Estos podrían ser incumplimiento de normativas de protección de datos, patentes y licencias.

2) Análisis de riesgo

En cuanto a la probabilidad y el impacto del análisis de riesgo, por ejemplo, podemos mencionar que los fallos en el software tienen una alta probabilidad de ocurrencia pero un impacto medio, dado que pueden ser solucionados rápidamente. Sin embargo, las vulnerabilidades de seguridad se consideran de baja probabilidad y alto impacto debido a los potenciales daños reputacionales y financieros.

Por otro lado, en cuanto a los riesgos de mercado, la competencia intensa se identifica como de alta probabilidad y alto impacto, lo que podría afectar significativamente la cuota de mercado y los ingresos.

En cuanto a los riesgos operativos, los retrasos en la contratación de personal o en la cadena de suministro se consideran de probabilidad media y de impacto medio, ya que podrían causar retrasos en el lanzamiento pero son manejables con una planificación adecuada.

Por último, el incumplimiento de normativas de protección de datos se considera de baja probabilidad pero de alto impacto, dada la posibilidad de sanciones legales y pérdida de confianza del cliente.

3) Evaluación y priorización de riesgos

En esta fase, la empresa considera priorizar el tratamiento de los riesgos de seguridad y de mercado como críticos, dado su alto impacto potencial en la empresa. 

Por otro lado, los riesgos técnicos generales y operativos se consideran importantes pero de prioridad secundaria. Mientras que los riesgos legales y regulatorios, aunque de alto impacto, se consideran menos probables y se preparan planes de contingencia.

4) Desarrollo de un plan de gestión de riesgos

Dicho plan contempla, en primer lugar, implementar un proceso de revisión y prueba exhaustiva del software antes del lanzamiento. Igualmente, lo ideal es preparar un equipo de respuesta rápida para solucionar problemas detectados post-lanzamiento.

En segundo lugar, y en relación con los riesgos de mercado, toca desarrollar una estrategia de marketing agresiva y diferenciación de productos para capturar cuota de mercado y realizar seguimiento continuo de la competencia.

En tercer lugar, los riesgos operativos implicaría establecer relaciones con múltiples headhunters para poder contratar de forma más fácil y rápida y de múltiples proveedores para mitigar los retrasos en la cadena de suministro y planificar un cronograma de desarrollo flexible.

Y, por último, se debe consultar a expertos legales para asegurar el cumplimiento total y realizar auditorías regulares de cumplimiento.

5) Implementación y monitoreo

Por último, es necesario establecer un sistema de monitoreo continuo que incluya la revisión regular de los riesgos identificados y la detección de nuevos riesgos, ajustando el plan según sea preciso.

Análisis de riesgos: Recomendaciones para tu negocio

Dicho esto, ¿necesitas ayuda con el análisis de riesgos de tu organización? Si después de estudiar este ejemplo de análisis de riesgos, sientes que tu empresa necesita una mirada experta que la proteja de posibles amenazas, considera la opción de contar con el apoyo de una  consultoría de negocio.

Ponte en contacto conmigo y hablemos sobre las posibilidades de tu compañía.

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